Tuesday, February 16, 2010

POEMAS DE FREDDY HERNÁNDEZ ÁLVAREZ (1949-2010)


POEMAS DE FREDDY HERNÁNDEZ ÁLVAREZ (1949-2010)

Nota y selección de José Carlos De Nóbrega


En la madrugada de hoy, martes de carnaval 16 de febrero de 2010, falleció el poeta Freddy Hernández Álvarez. Recordamos con lúdico placer muchos de sus libros, dionisíacos hasta rabiar y nada apolíneos: los poemarios Memoriales del ángel bastardo (1987 y 2006, editorial Actum), El adivinador de enigmas (1989 y 1997, UDO-Sucre), Palabras del bienvenido (Antología poética, 2003, Ediciones Poesía de la Universidad de Carabobo), Litoral de Ausentes (2006, Fundación Editorial el Perro y la Rana) y El ardid del almirante (2006, Monte Ávila Editores Latinoamericana); y las novelas Huayra: la transparencia (1995, Ediciones en ancas) y Los argonautas ebrios (1999, Universidad de Carabobo, Premio de Novela "40º Aniversario de la Reapertura de la U.C."). Se nos antojan como líneas de su trabajo poético y narrativo la parodia de los totalitarismos religiosos, políticos e ideológicos; la celebración tabernaria de la vida en homenaje a las queridas prostitutas; una relectura personal y festiva de los clásicos greco-latinos, amén de la recreación de la infancia y la adolescencia en La Guaira, tanto en sus connotaciones iniciáticas (a la manera de un bildungsroman tropical encendido con la loca luz de Armando Reverón) como en las trágicas (el homenaje a los muertos del deslave en Vargas, 1999, que sin embargo tiende un puente permanente y dialéctico entre la nostalgia y la esperanza). Sólo nos resta decir que tus lectores, Freddy, no te abandonan a la luz reveladora de los bombillos y las lámparas de kerosene que alumbran la belleza de los prostíbulos, los bares y las salas de billar estampados por Van Gogh.



Testimonio de un naúfrago

EL VIAJE A BIBLOS

Yo decidí un largo viaje en abril, presuroso
sorprendí a la puerta con dos grandes maletas
Era el único huésped interesante, que hablaba a las cosas
salí con mi caja de insectos y la carpeta de códigos ancestrales
bajo el brazo, en las valijas llevaba alguna ropa
el resto fueron libros de viajes ya leídos, mi plan consistía
en repartirlos al azar. Por la noche abandoné la casa
anduve veinte años viajando en mi sombra, la primera experiencia
fue unirme a un grupo numeroso de gitanos que marchaban a Biblos
les conté parte de mi vida, me permitieron subir a una de sus carretas
una carreta de color indefinido
En el camino aprendí a hacer trampas
a leer en los posos de café, nos deteníamos en las tabernas
y bebíamos hasta altas horas de la noche
No quisiera comentar algunas cosas más íntimas
como aquello de participar en orgías con hermosos seres
de sus sueños compartidos.


TESTIMONIO DE UNA PROSTITUTA

“Presentíamos a los feroces arqueros leprosos, siempre al acecho
de las caravanas en los caminos de Biblos,
su mímesis entorpeciendo
nuestros mejores actos, autómatas dejando caer
el vino tibio en sus labios cuarteados,
apoderándose de nuestras alhajas,
del pudor de las gitanas más jóvenes,
sus horribles blasfemias,
todo esto
vaticinaba los desastres...

Yo lo digo porque me reconforta y las viejas prostitutas ya ancianas
internadas en lóbregos cuartos pensamos en nuestros días de gloria
jamás creímos que se acabarían los viajes interminables, entonces
oficiábamos las artes del terapeuta, dispensadoras del amor
los carretones de los gitanos fueron escenarios de nuestra vastedad erótica
consentíamos el asalto de soldados viriles; aún recuerdo a los bellos
marinos hablándome de sus viajes irrealizados, de sus clarividencias
hasta que echados a mis pies en la ebriedad inocente llamaban a sus
/ madres,
llenos de ausencia, supliciados bajo la mantis religiosa
lloraban , nos elegían entre los anagramas de la infancia,
hubo quien me decía, Divina Doncella de Proa,
se hacía de noche y lo arrastraba al fondo,
a la improvisada alcoba, al limbo nauseabundo entre salazones
toneles de vino y telas perfectamente teñidas de púrpura

Yo, que nunca di muestra de frigidez y atendía todos los llamados del
/ sexo
digo esto, porque es necesario hablar de los naufragios...”.


EL FESTÍN DE BALTAZAR
(mane, tecel, fares)


Cuando te invite el rey al festín
procura:


no comer en exceso
ni beber hasta la inconsciencia

no hablar de lo que no sabes
ni ser el último
en desocupar la mesa
y sobre todo:
ni en la misma embriaguez
te pongas precio

Antes de asistir
hazte el firme propósito
de no venderte


INFORME DEL SANTO OFICIO
(para la unificación de las creencias)

“Los algoritmos
La topología de los espacios métricos
La teoría de la relatividad
La nueva astronomía. La teoría de los Black Hole
El desciframiento de los mensajes radioespaciales
El descubrimiento del holograma
La gama de posibilidades del cálculo infinitesimal
La babel de los nuevos lenguajes
En fin: las llamadas ciencias exactas
no nos dicen más que los sueños
de un pescador o de un guardador de rebaños”.


EXCUSEN MI TORPEZA

Han venido por mí
en vano han repetido lo mismo:
-Por qué no cesas
en ese trabajo inútil

Sé que es imperdonable
sostener toda la vida
un trabajo inútil

Excusen mi torpeza

Pido a Dios por mis cómplices
ésos que me leerán a destajo

Espero
que si algún día tengo éxito
tan sólo sea un malentendido

Excusen mi torpeza.


EL BANDO DE LOS POETAS

Somos parte de uno de los dos bandos
en que se han dividido las ratas
por apoderarse de las heces de la ciudad
Si resultamos del bando vencedor
automáticamente surgirán dos nuevos bandos
en cualquiera de esas batallas emprendidas
quedaremos entre los vencidos a dentelladas
o marginados entre los vencedores.


LA TRAGEDIA DEL ÚLTIMO MESÍAS

Entonces apareció el profeta
habló de suspender los tormentos
y desmantelar todas las coartadas
desenmascarar todos los vicios
nadie le creyó
pese a todo su poder
fue rechazado
se tomó por máscara su verdadero rostro
luego enviaron un breve mensaje a Dios:
ya no podrás mandar más mesías
tendrás que venir tú mismo.

RETRATO ESCRITO DEL ÁNGEL DE LA GUARDA

Dicen que cuando uno muere
se invierte el papel
de ángel guardián
y nos toca la guarda del ángel
no pierdo la esperanza
de resguardar a un ángel
asiduo a cualquier taberna del Paraíso.


CUENTO MÍNIMO

Érase un hombre tan solitario y triste
que la noche de su muerte, su ángel
de la guarda estaba de pernocta.


EN EL PRECISO INSTANTE QUE EL SEMÁFORO CAMBIA A ROJO

Esta playa, imagínala
ciudad de bulliciosas avenidas
de mucha gente al trote
nada sidhartiana, silenciosa
sólo así lograrás verte
sonoro, en lo libre que eres
Esta playa presérvala
de la cantidad y poca
relevancia de sus visitantes
ciudadanos que fluyen y refluyen
a las horas pico de sus ciudades
de muchos hombres ignorantes
de sus días que están contados
Esta playa, ciérrala para ti
tangente al círculo infernal
es tan frágil, de pocos huéspedes
aislados, íngrimos y solitarios
que ya no obedecen
al semáforo que cambia a rojo.


EN ESTA CASA

Para Miguel Otero Silva

En esta casa que fue de putas
ningún hecho lo sustentó lo fortuito
tergiversó la cronología de lo sucedido
El que vino tuvo argumentos persuasivos
Si alguien pretendió o premeditó tener
otra cosa que amor a cambio
no hay hasta ahora nada que lo demuestre
Los días de saciar marineros necios
o de complacer apetitos de forasteros borrachos
son asuntos del pasado
Pechos desnudos a punto de caer
sexos con débiles propuestas de permanencia
dibujan sus sombras en las paredes desconchadas
Nada se yergue en estas ruinas
tras cuatro decenios de inactividad


Pocos recuerdan las versiones malogradas
las enfermedades que implantó aquí el amor
Su imagen aguarda por la clausura
para retornar al polvo y al frío
al silencio más cruento, a su énfasis trágico
a las convicciones más implacables

Ajenas al ardor de lo que fue su empresa
de antiguas simulaciones infructuosas
amparada en la impaciencia y el tumulto
hoy trama en la debilidad de la memoria
aquellas horas del abrazo, la resonancia de besos
el frenesí de la sangre agolpada, el entusiasmo del éxtasis
innumerables instantes de un combate
que pocos pensaron inútil
entonces se permitían demasiadas ilusiones

En esta casa que fue de putas
el amor no tuvo soluciones definitivas
acaso sí la complicidad de la confidencia
amparada en la posesión pero borrada con el tiempo
la imagen de clausura habla de un verdadero motivo
del pretexto de la vida al sentirse ajeno
y entregarse para suplir cualquier malentendido

En esta casa que fue de putas
hoy se oxidan armas voluptuosas
la herrumbre impide seguir
transigiendo con el oprobio
el olvido alimenta al transgresor amoroso

Promesas, promesas, votos a la desaparecida ramería
a la clientela, a las candilejas, a las risas
a esos fantasmas que regresan cada noche
No habrá resentimientos, infidelidades
lo fogoso placerá más en el recuerdo
que en el encuentro con la humedad del cuarto
la excitación de la desnudez, los jadeos
de dos cuerpos que se desbastan mutuamente

En ésta que fue de putas
pretendimos sólo lo justo
no destilamos el amor
lo conden(s)amos.

2 comments:

YVONNE ANTONIETA said...

TE AMO TIO ERES Y SEGUIRAS SIENDO EJEMPLO PARA TODOS NUNCA TE OLVIDAREMOS

marcos Gonzalez said...

Excelente poeta, mas vivo que nunca