EUGENIO MONTEJO FALLECIÓ EN VALENCIA. Texto seleccionado y nota de Luis Alberto Angulo

Eugenio Montejo


ESTA TIERRA


Esta tierra jamás ha sido nuestra,
tampoco fue de quienes yacen en sus campos
ni será de quien venga.
Hace mucho palpamos su paisaje
con un llanto de expósitos
abandonados por antiguas carabelas.

Esta tierra de tórridas llanuras
llevamos siglos habitándola y no nos pertenece.
Quienes antes la amaron ya sabían
que no basta pagarla con la vida
o fundar casa en sus montes
para un día merecerla.
Y sin embargo hasta el final permanecieron,
Nunca desearon otra visión para sus ojos
ni otro solar para su muerte.
En ella están dormidos y hablan a solas,
a veces se oyen,
alzan sus voces en medio del follaje
y el viento las dispersa.

No serán nuestros sus vastos horizontes,
ninguna gota de sus ríos,
ni de quienes la pueblen después,
fue ajena siempre en cada piedra,
en cada árbol.
Demasiado verdes son los bosques
de sus espacios sin nieve.
Sus colores desnudan las palabras;
en nuestras charlas siempre se delatan
sonidos forasteros.

Esta tierra feraz, sentimental, amarga,
que no se deja poseer,
no será para nosotros ni de nadie
pero hasta en la sombra le pertenecemos.
Ya nuestros cuerpos son palmas de sus costas,
aferrados a indómitas raíces,
que no verá nunca partir
aunque retornen del mar las carabelas.


EUGENIO MONTEJO. Eugenio “Montejo” Hernández Álvarez (Caracas, 1938-Valencia, 2008). Ha publicado los libros de poesía: Elegos, 1967; Muerte y memoria, 1972; Algunas palabras, 1976; Terredad, 1978; Trópico absoluto, 1982; El poeta sin río, 1985; Alfabeto del mundo, 1986; Adiós al siglo XX, 1992; Partitura de la cigarra, 1999; El hacha de seda. Obtuvo el Premio Nacional de Literatura y el Premio Internacional de Poesía “Octavio Paz” de México.

Lamento informar que el poeta Eugenio Montejo falleció esta noche (alrededor de las 10 -5 de junio 2008-) en el Policlínico La Viña de Valencia luego de una dura enfermedad. Le sobreviven dos hijos y su esposa Aymará Pinto. Montejo perteneció en los años sesenta al grupo literario y a la redacción de la revista "Azar Rey" integrados -además de él- por Teófilo Tortolero y José Miguel Villarroel París en la Escuela de Derecho de la Universidad de Carabobo. Estuvo vinculado a publicaciones universitarias tales como Separata, Zona Tórrida y la revista Poesía, fundada en 1971 por Alejandro Oliveros y Reynaldo Pérez Só. Constituyendo en esa época lo que algunos llamaron "Grupo de Valencia".